¿El verano es de los cobrizos?

Los tonos rojizos y anaranjados dan un paso y llegan al verano con toda su variedad cromática. Eso los hace todavía más apetecibles y permiten crear un color a medida para cada persona. Para escogerlo y acertar, no solo importa la piel, también el color de ojos.

Para melenas castañas. El rojizo oscuro se mezcla con el dorado marrón más claro y es perfecto para melenas castañas que quieren revitalizarse o para morenas que desean llevar más luz, pero prescindiendo de los rubios. Es una tonalidad que va muy bien con ojos marrones o negros y pieles oliváceas.», asegura Raquel Saiz de Salón Blue.

Ojos verdes y piel blanca. Los ojos verdes son los que mejor encajan con el ginger, también los azules. Sin embargo, no pierdas la ilusión, los marrones tienen su espacio. «Esta tonalidad va muy bien con pieles pálidas, ya que corrige el tono rosa de la piel, creando un aspecto más neutro y uniforme. Como mejor se ve es brillante, para ello aplica aceite para cabello, hará culminar el look.», propone Rafael Bueno.

Ojos miel y piel cálida. Un tono así realza el color de los ojos y potencia la luz en la piel. «Esta tonalidad mantiene el carácter pese a aproximarse a más a los naranjas, resaltando la piel y haciendo destacar el color de los ojos. Los tonos rojizos son más fáciles de mantener, sobre todo si tenemos una base clara como un rubio oscuro o un castaño claro, pero igualmente para el día a día necesita champú y acondicionador para pelo teñido. Así prolongarás su brillo.», sugiere Felicitas Ordás.

Ojos oscuros y piel olivácea. Si quieres darle impulso a tu imagen este es el tono, aunque es cierto que no todo el mundo se atreve con él. «Este cobrizo conserva matices anaranjados y eso lo hace tan vibrante. Es un tono que queda bien con todos los tipos de piel y ojos, pero quizá destaque más cuando ambos son oscuros. Para mantenerlo así de vibrante recomiendo refrescar el color con un champú con color, así como nutrir mucho.», aconseja M.ª José Llata.

Ginger violeta. Si nuestra piel es morena o bien nos bronceamos mucho en verano, este tono es ideal para aportarle una chispa a nuestra imagen. «Este tono tiene elementos del ginger, pero con un matiz violeta suave que le da ese toque más intenso. Funciona especialmente bien con las pieles morenas, ya que les aporta luz de un modo muy sugerente.», añade Manuel Mon.